Frijoles: la guarnición con un lado oscuro

Los frijoles son una fuente deliciosa de proteínas y son indispensables para un lote de chile. Sin embargo, albergan un secreto amenazante: los frijoles poco cocidos contienen fitohemaglutinina, también conocida como lectina de frijol, que es una toxina que causa intoxicación alimentaria.

frijoles

¿Qué hace que los frijoles rojos sean potencialmente peligrosos?

La lectina es una proteína que se puede encontrar en muchos tipos de frijoles, pero está más concentrada en los frijoles. La ingestión de altas dosis de lectina puede provocar diarrea, náuseas y vómitos. La lectina en los frijoles rojos está tan concentrada que algunas personas pueden enfermarse después de consumir solo cuatro o cinco frijoles. Y en algunos casos, la gravedad de los síntomas es directamente proporcional a la cantidad de frijoles ingeridos.

Sin embargo, hay un lado positivo. Aunque el dolor gastrointestinal aparece solo de una a tres horas después del consumo, la recuperación es igual de rápida. Después de la aparición de los síntomas, la enfermedad solo tarda entre tres y cuatro horas en desaparecer. Aunque algunas personas han sido hospitalizadas, no parece ser una enfermedad mortal.

tazón de chile

Cómo preparar correctamente los frijoles rojos

Preparar adecuadamente los frijoles rojos es una proceso largo. Siga estos consejos:

  • Al igual que lo hace con los productos frescos, siempre debe lavar sus frijoles.
  • Remoja los frijoles durante al menos cinco horas (lo ideal es 12 horas). Podría ser más sencillo planificar el plato con anticipación y dejar los frijoles en una olla durante la noche.
  • Los estudios han demostrado que hervir los frijoles durante 10 minutos a 100 ° C (212 ° F) erradica la lectina. Cuando termine de remojar, deseche el agua sucia y hierva los frijoles en agua fresca durante al menos 30 minutos. Curiosamente, se ha demostrado que los frijoles poco cocidos son más tóxicos que los frijoles crudos.
  • No use una olla de cocción lenta. El calor es insuficiente y puede resultar en frijoles poco cocidos y malestar estomacal.
  • Sabrá cuando estén listos cuando estén tiernos, pero firmes. Los frijoles duros y calcáreos están poco cocidos y los frijoles blandos están demasiado cocidos.

Asegurarse de estar informado sobre los riesgos de los frijoles mal cocidos es importante para garantizar que su comida sea tan segura como deliciosa. Si ha sufrido un enfermedad transmitida por alimentos por causas ajenas a su propia cuenta, es posible que tenga derecho a una indemnización. Llame a Allen & Allen para una consulta gratuita hoy, al 866-388-1307.