Vision Zero: Trabajando juntos para eliminar las muertes relacionadas con el tráfico

Visión cero

Las estadísticas sobre accidentes automovilísticos conmocionan la conciencia. En promedio, cada día pierden la vida 3.700 personas en las carreteras. Los accidentes automovilísticos son la principal causa de muerte entre jóvenes de 5 a 29 años en todo el mundo.

Al mismo tiempo, los viajes por carretera son un componente esencial de la vida estadounidense. Los datos de la Oficina de Estadísticas de Transporte muestran que los estadounidenses tomar 411 mil millones de unidades (definido como ir de un punto a otro en un solo día) todos los años. Eso es casi 1,500 viajes por persona, y el conductor promedio pasa casi 55 minutos al día detrás del volante.

 

La conclusión es ineludible: muchos estadounidenses viajan regularmente por carreteras y autopistas, y viajar por carreteras y autopistas es peligroso. No es de extrañar que Internet esté repleto de artículos, blogs e información relacionada con la mejora de la seguridad del conductor. Este es un tema importante con el que luchan muchos países de todo el mundo.

Un enfoque menos conocido y más formalizado para la seguridad del conductor es la política Visión Cero que fue adoptada por el Parlamento sueco en 1997. El objetivo de esta política es diseñar un sistema de transporte por carretera que eliminaría cualquier muerte o lesión grave relacionada con el tráfico. a través del país.

cruce de peatones en la calle

El sistema se implementó en 2000, y durante los siguientes diez años, el número de muertes entre los usuarios de automóviles suecos disminuyó en 60%. Las carreteras de Suecia se encuentran entre las más seguras del mundo, con solo 3 de cada 100.000 suecos que mueren en las carreteras cada año (en comparación con 10 de cada 100.000 estadounidenses).

Las políticas de Vision Zero transfieren una parte de la responsabilidad de la seguridad vial de los usuarios a los diseñadores de sistemas de transporte, con el objetivo de crear infraestructura y regulaciones diseñadas para maximizar la seguridad. Un aspecto de la política sugiere velocidades máximas de viaje que están directamente relacionadas con la infraestructura y la configuración de las carreteras. Esto se tomaría junto con la implementación de las mejores prácticas en el diseño de vehículos y el uso de la restricción 100%.

Por ejemplo, en lugares donde es posible que haya conflictos entre peatones y automóviles, la velocidad máxima de viaje se establece en 19 mph para eliminar impactos de alta velocidad y lesiones catastróficas. En carreteras sin posibilidad de impactos laterales o frontales (es decir, los carriles de circulación en una carretera), la velocidad máxima más segura para los automovilistas es de 62 millas por hora.

visión cero

Foto cortesía de Vision Zero Network

Equilibrar la eficiencia de los viajes por carretera con la preocupación por la seguridad del viajero es un tema complejo para los legisladores. En los Estados Unidos, las políticas de Vision Zero se han implementado en una variedad de ubicaciones. Muchas iniciativas preliminares se enfocaron en aumentar las multas por exceso de velocidad o campañas de divulgación diseñadas para enfocar una mayor conciencia sobre los problemas de seguridad vial. En 2021, con los legisladores en Washington DC centrando su atención en actualizar la infraestructura de Estados Unidos, el Consejo Nacional de Seguridad ha iniciado #ZeroTrafficDeaths. Pide a los legisladores que incorporen las políticas de Visión Cero en los planes para la mejora de las carreteras nacionales. Solo el tiempo dirá si estos esfuerzos tienen éxito.

Un compromiso nacional con cero muertes por accidentes de tránsito parece, al menos a primera vista, un objetivo elevado y en gran medida político. Sin embargo, los fundamentos subyacentes de la política Vision Zero (tal como se adoptó en Suecia) tienen sentido. Si el análisis científico se aplica al diseño de carreteras y las designaciones de límites de velocidad máxima se basan en la física en lugar de la eficiencia del viajero, los automovilistas estadounidenses viajarán en un entorno inherentemente más seguro.

Si los fabricantes de automóviles se centran en mejorar la tecnología de seguridad de los pasajeros, los automovilistas estadounidenses también viajarán en vehículos más seguros. Si se hace más hincapié en la conducción segura, incluida la prohibición de que los conductores porten dispositivos de comunicación personal mientras conducen vehículos motorizados, los conductores estadounidenses estarán más seguros al volante. Trabajando juntos, los conductores más seguros pueden operar vehículos más seguros en carreteras más seguras, lo que inevitablemente conducirá a una reducción dramática de las lesiones y muertes relacionadas con el tránsito. Este es un resultado que todos pueden respaldar.

Si ha resultado lesionado en un accidente de auto por causas ajenas a su propia cuenta, es posible que tenga derecho a una indemnización. Llama Allen y Allen hoy para una consulta gratuita al 866-388-1307.