Accidente de trabajo | Muerte por negligencia - $5.5M

Localización: Confidencial
Asentamiento: $5.5 M

Esta acción de muerte por negligencia surge de un incidente industrial que ocurrió el 17 de agosto de 2017.  En el momento del incidente, el difunto trabajaba como propietario / operador independiente de un camión maderero y estaba entregando una carga de madera a un aserradero.  Cuando llegó, se le indicó que se estacionara cerca de una grúa para poder sacar los troncos de su remolque.  También se le indicó que saliera del tractor, se pusiera un chaleco de seguridad y un casco, y que entrara en una jaula de seguridad de acero amarilla ubicada cerca.  Esto se hizo para su protección en caso de que se cayera un tronco mientras se descargaba del remolque.

El operador de la grúa pudo quitar el primer "bocado" de troncos del remolque sin incidentes.  Mientras se preparaba para quitar el segundo trozo de troncos, el carro de la grúa se “salió” provocando que la garra se abriera y golpeara el refugio, derribándolo y sobre las piernas del difunto.  Finalmente, se retiró la jaula y el difunto fue transportado de emergencia por un equipo de rescate a un Centro de Traumatología de Nivel I para recibir tratamiento.

El difunto sufrió una fractura abierta de tibia derecha de grado 3B, una fractura proximal del peroné derecho y lesiones por desglose del tejido blando anterior con contaminación significativa y restos metálicos dentro de la herida.  Además, padecía síndrome compartimental en la pierna izquierda y una importante herida abierta en el brazo derecho.  Fue llevado de emergencia a cirugía, donde se sometió a una fasciotomía de cuatro compartimentos en su pierna izquierda y una cirugía de reducción abierta / fijación externa en un intento de reparar su pierna derecha.  También se aplicaron vacunas para heridas en ambas piernas.  Desafortunadamente, la contaminación del lugar de trabajo hizo que la infección fuera inevitable.  En total, se realizaron 14 cirugías diferentes en un intento de irrigar y desbridar las heridas y promover la cicatrización.  Esas cirugías no tuvieron éxito y le amputaron la pierna derecha por debajo de la rodilla.  La infección avanzó y el 21 de septiembre de 2017 se tomó la decisión de retirarle la pierna derecha por encima de la rodilla.  Su condición siguió empeorando y el 25 de septiembre de 2017 su familia tomó la decisión de retirarle el soporte vital para que pudiera morir con dignidad.  Falleció más tarde ese día con su familia a su lado.

El fallecido tenía 63 años.  Los beneficiarios incluyeron a su esposa de 35 años y sus dos hijos adultos.

Se presentó una demanda en la que se afirma que los acusados fueron negligentes en la forma en que se hizo funcionar, inspeccionar y mantener la grúa.  También se incluyeron denuncias de diseño inadecuado del lugar de trabajo (basado en la proximidad de la jaula de seguridad a la grúa) y capacitación negligente.

El caso se resolvió como resultado de mediación.