Lesiones Catastróficas – $1.3M

LAS REGLAS DE CONDUCTA PROFESIONAL DEL BAR DEL ESTADO DE VIRGINIA REQUIEREN QUE TODOS LOS ABOGADOS HAGAN LA SIGUIENTE DECLARACIÓN Y RENUNCIA A LOS RESULTADOS DE SU CASO.

LOS ACUERDOS Y VERDICTOS EN TODOS LOS CASOS DEPENDEN DE DIVERSOS FACTORES Y CIRCUNSTANCIAS QUE SON ÚNICOS EN CADA CASO. POR LO TANTO, LOS RESULTADOS ANTERIORES EN CASOS NO SON UNA GARANTÍA O PREDICCIÓN DE RESULTADOS SIMILARES EN CASOS FUTUROS QUE LA FIRMA DE ALLEN Y SUS ABOGADOS PUEDAN ACEPTAR.

Localización: Confidencial
Lesiones: Lesiones catastróficas
Asentamiento: $1,318,576

La madre de la demandante, una mujer embarazada de unos veinte años, se presentó en el hospital con ruptura espontánea de membranas y fue admitida en la unidad de Labor & Delivery. El trabajo de parto se aceleró con oxitocina y la madre parecía estar progresando sin complicaciones ni angustia para el feto. Algún tiempo después, la frecuencia cardíaca fetal descendió hasta los 90 y permaneció disminuida durante 5 minutos antes de volver a la línea de base. En este punto, el obstetra acusado aplicó fórceps en un intento de rotar al bebé. La rotación fue exitosa pero no se notó ningún descenso después de tres intentos de tracción. Los tonos cardíacos fetales se mantuvieron inestables con disminuciones notables y sostenidas hasta los 60. Se intentó una extracción al vacío y no tuvo éxito. En este momento, la madre fue trasladada al quirófano para una cesárea de emergencia.

Luego de la llegada de la madre al quirófano, se tomó la decisión de continuar con el parto vaginal espontáneo. La madre continuó presionando en los intentos de parto durante otros 90 minutos con trazados cardíacos fetales inconsistentes y desaceleraciones tardías notables en la frecuencia cardíaca fetal. Se aplicó nuevamente la succión al vacío y el bebé nació con distocia de hombros significativa.

En el momento de la presentación, el bebé estaba flácido, cianótico y sin esfuerzo respiratorio espontáneo. Se documentaron edemas, hematomas y laceraciones en el cráneo y la cara del bebé. Los reflejos eran débiles y lo intubaron y le administraron líquidos por vía intravenosa. Una tomografía computarizada de la cabeza reveló un hematoma subgaleal, fractura de cráneo parietal izquierdo y un hematoma subdural que se extendía hacia el tentorio.

Finalmente, al niño pequeño se le diagnosticó parálisis cerebral espástica. Requerirá asistencia médica y de vida por el resto de su vida. El demandante alegó que el médico demandado no reconoció signos claros de sufrimiento fetal, no manejó adecuadamente el trabajo de parto y el parto, y no dio a luz de emergencia al bebé. El caso se resolvió durante el litigio.