Localización: Confidencial
Asentamiento: $450,000
En mayo de 2018, el cliente de Derrick Walker, un operador de tanques de combustible, se dirigía a una estación de entrega cuando su vehículo fue golpeado a alta velocidad por otro conductor que operaba un vehículo de pasajeros. Inicialmente, se pensó que el cliente había sufrido una distensión en el codo en el accidente. Cuando sus síntomas no se resolvieron con reposo, medicación y otro tratamiento conservador, fue derivado a un cirujano ortopédico que le diagnosticó codo de tenista y posteriormente le realizó una cirugía para solucionar el problema. A pesar de la cirugía, el dolor persistió y una resonancia magnética mostró desgarros parciales de los tendones extensores del codo derecho. En consecuencia, el cliente se sometió a una segunda cirugía que tuvo éxito en la reparación de los tendones, pero no logró aliviar el dolor residual, la disminución de la fuerza de agarre, las limitaciones de elevación y otras limitaciones funcionales. Aunque el cliente de Derrick no pudo regresar a trabajar como operador de tanques de combustible, logró pasar a otra línea de trabajo con menos demandas físicas y, por lo tanto, no sufrió una pérdida significativa de capacidad de ingresos.
El caso se resolvió por $450,000 muy cerca del juicio.
Únase a Allen & Allen para felicitar a Derrick Walker por su excelente trabajo en hacer justicia a su cliente.
